martes, 31 de enero de 2012

Acuerdo fiscal europeo ¿pan para hoy y hambre para mañana?


Resulta bastante claro que a Europa se le están acabando las balas y el tiempo. Hace ya bastante que las opciones eran dos y no más.  
a)      Salidas parciales de la Unión con el eventual riesgo de una desintegración; 
b)      Una Unión fiscal  entre los miembros fuerte, duradera; y vemos.
 
También era evidente que ninguna de las dos era una salida fácil ni segura.
Lo que también resultaba probable en el análisis de hace un tiempo era que la inacción podría generar una cascada de defaults, crisis bancaria y colapso de las finanzas internacionales de magnitudes impredecibles junto con la quiebra de la zona del Euro. ¿Nos acercamos a eso?
 
Se han tomado algunas medidas, algo tardías por ser benévolo, pero que no terminan de despejar los interrogantes. Por ejemplo, ¿estarán los países de la Unión despejando los verdaderos riesgos o simplemente pateando la pelota hacia adelante?
El tema del día vuelve a ser Grecia. La misma Grecia que está en carpeta hace ya dos años, la misma a la cual teóricamente se le habían otorgado desembolsos para blindar tres años de compromisos pero un año y medio después se le complicaba hacer frente a sus vencimientos. La que ya efectuó una quita primero del 21% a sus acreedores y últimamente amplió a 50%.
 
Nadie está en condiciones de asegurar hoy que la reducción sea suficiente, pero es probable que no. Grecia, la que iba a encarrilar su déficit pero según números preliminares tiene un desfasaje en el ejercicio fiscal 2011 cercano a 10% del PBI. La misma que demoraría hasta el año 2120, si no hiciera quita, (creciendo al 2% real y logrando un superávit primario del  1% del PBI) en llegar al tope máximo de endeudamiento estipulado en el acta de constitución de la Eurozona.
 
Grecia parece ser punta de lanza para los incumplimientos, fue el primero en cometer una cesación de pagos (default) en el siglo IV a. de C., cuando el Templo de Delfos mandaba mucho y era acreedor de nueve ciudades morosas, como los municipios de ahora. También es el primero en ser catalogado en alguna suerte de suspensión o default después de haberse conformado el bloque económico más grande del mundo.
 
Casualmente, también en la lista de malos pagadores se encuentra España, quién en 13 ocasiones ha incurrido en default desde Felipe II en 1557, considerada como la primera quiebra de un Estado moderno.
Por eso, a no rasgarse las vestiduras como si estas cosas nunca hubieron sucedido. Lamentablemente pasaron, pasan y pasarán.
Hoy se conocieron los datos de desempleo en la Eurozona de diciembre, los que adquieren ribetes por demás preocupantes. Casi 24 millones de personas están desempleadas, en España el desempleo alcanza casi el 23%. En un año se destruyeron casi 1 millón de puestos de trabajo en la UE y los jóvenes son por lejos los más afectados, principalmente en España.
 
Se me ocurren muchas preguntas, todas ellas difíciles de contestar, sólo por mencionar algunas: ¿cómo tolerará un ajuste tremendo el pueblo griego y cómo lo harán el resto de los europeos? ¿Qué país sigue en la lista? Alemania, aunque quisiera ¿puede salvar a la Eurozona sola? ¿El acuerdo firmado ayer será insuficiente el mes próximo? ¿Cómo hará Italia para cubrir sus obligaciones si el mercado se tensa? Solamente en el año 2012 vencen entre Intereses y Capital 300.000 Millones de Euros (403.000 Millones de Dólares) Esto significa casi tres reestructuraciones de la Argentina 2001. ¿Por qué se opone tan enfáticamente el Reino Unido?
 
En economía cuando hay tantas preguntas el escenario no es el mejor, simplemente porque hay incertidumbre y la incertidumbre es enemiga de los negocios.



lunes, 23 de enero de 2012

Argentina y el recrudecimiento de la crisis internacional

Publicado en El Cronista Comercial
 
¿Argentina está blindada ante un recrudecimiento de la crisis internacional? La respuesta parece deducible de la historia. ¿Lo ha estado durante el 2008/2009, o en las décadas del 30/70/80, o durante las dos grandes guerras mundiales?
 
El efecto contagio está relacionado con la cantidad de flujos financieros y comerciales que se registran con el mundo. Un gobierno solo puede atemperar la crisis potenciando el mercado interno y ampliando sus márgenes de solvencia y liquidez, pero difícilmente pueda eliminar un efecto adverso en su totalidad por más empeño que ponga.
 
Ahora bien, ¿cuáles son los mayores peligros externos que se enfrentan? Los caminos conducen a Europa y Estados Unidos. En ambos casos hay señalas alarmantes y también ambos dos conforman puntos de interés para nuestro sector exportador. Durante el 2011, la UE fue el segundo destino de nuestras exportaciones con un 17% del total, siendo solo superado por el Mercosur. En tanto el Nafta fue el cuarto bloque en importancia  con un 9% del total, donde  más de la mitad de esas compras corresponden solamente a los Estados Unidos.
  
La crisis de la deuda de Europa tiene un final abierto e impredecible, mientras que la principal economía del mundo no termina de solucionar sus viejos problemas y podría verse afectada frente a un empeoramiento de Europa.
 
¿China e India pueden sustituirlos? La historia nuevamente. No lo han logrado durante el 2009, es poco probable que puedan en la actualidad.
 
En cuanto a Estados Unidos y analizando los últimos comunicados de la FED queda en evidencia que el temor sigue estando más sesgado hacia la deflación que a la inflación, preanunciando que el crecimiento es más bien lento. Si bien hay algunos indicadores que mostraron cierta mejoría últimamente, lo más problemático sigue estando en los mismos lugares. Por el lado de las luces, el informe de empleo de diciembre (preliminar) marca que se construyeron 200.000 puestos, registrándose un descenso en la tasa de desempleo que se ubicó en torno a 8,5%. Para ser justos también hay que decir que la economía americana necesita un promedio de 150.000 puestos de trabajo creados por mes para absorber a la cantidad de nuevos trabajadores que ingresan al mercado. Durante todo 2011 creó 1.640.000 puestos netos, lo que hacen a 137 mil promedio por mes. Durante el 2010 creó 940.000, mientras que en el periodo 2008/2009 destruyó 7.818.000 puestos de trabajo netos. El balance de los últimos 4 años arroja una destrucción neta de 5.238.000 empleos. Un dato escalofriante lo configura las 41 semanas que un norteamericano se encuentra desempleado en promedio, mientras que en la década del 80 (peor momento después de la SGM) alcanzaba 21 semanas.
 
Paralelamente, el consumo también pareció avanzar a un mejor paso sobre final del año pasado, siendo la revitalización incipiente del crédito un fuerte estimulante. Pero las sombras aparecen en los precios inmobiliarios, piedra angular de la crisis. El último dato disponible (octubre 2011 medidos por S&P en 20 ciudades) evidencia una reducción de 33% comparados a los valores previos a la crisis, constituyéndose así en el peor registro desde marzo del 2003 a la fecha. En tanto que los números fiscales se encuentran comprometidos y los ajustes de gasto público que se están llevando adelante difícilmente puedan evitar que el Presidente Obama vuelva a solicitar ampliaciones de deuda, en un año que para colmo de males enfrentará elecciones presidenciales y en donde puede tambalear la AAA.
 
Una salida rápida vendida masivamente durante años anteriores parece no tener su correlato en la realidad, y ahora el interrogante podría nuevamente aparecer en un futuro próximo.
  

martes, 17 de enero de 2012

Las calificadoras corren de atrás


Publicado en Radio el Mundo Digital
Entrevista para el Programa Pablo y a la Bolsa conducido por Pablo Wende y Ruben Rabanal.
 
Sergio Mantoni: "el indicador más preocupante es el déficit fiscal, excede líneas razonables, va deteriorando permanentemente la solvencia y después afecta a las calificaciones".
 
El economista, se refirió a la situación económica en la  Eurozona, y comentó que “cuando las crisis económicas se dilatan en el tiempo se transforman en crisis políticas, lo tenemos en Europa con caídas de gobiernos, Papandreu cayó en Grecia, Berlusconi en Italia hasta el mismo Gordon Brown tuvo que dejar el poder, Rodríguez Zapatero y Merkel perdieron elecciones y Sarkozy está complicado de cara a las próximas”.
 
Mantoni, dijo que “a los ajustes hay que anticiparlos. El ajuste es el resultado de la negligencia de no haber podido mantener un gasto adecuado a lo largo del tiempo, en algún momento sobrevienen los indicadores de insolvencia y hay que hacer los ajustes del caso. Es un gran problema de los gobiernos en general. A ningún gobierno le gusta ahorrar para los próximos gobiernos, para las futuras generaciones o hacer ajustes preventivos. Por eso hay gobiernos que ahorran para arreglar el problema que otros generaron o gobierno que gastan la credibilidad y la solvencia que otros acuñaron anteriormente”. 
 
En declaraciones a Radio El Mundo, manifestó que “asistimos a una inercia negativa donde los datos nuevos que salen son peores que los anteriores. 
 
Además, expresó que “lo peor es la dilatación de las medidas”.